Sus Últimos días

En la noche del 28 de diciembre de 1976, ingresaron de forma intempestiva en su domicilio particular y en la madrugada del 29 de diciembre, un grupo de aproximadamente 8 hombres fuertemente armados, invocando una comisión oficial, sin mostrar identificación alguna secuestraron impunemente a nuestro querido Secretario General. Jamás pudimos comprobar el paradero ni cuál fue el destino de Jorge Di Pascuale.

El siguiente es el relato de Fernando Di Pascuale, hijo de Jorge, quien brinda el testimonio de una sobreviviente del campo de concentración "El Vesubio" que compartió con él.

Impera la injusticia
Ella expresa como fueron los últimos días de nuestro inolvidable compañero: “el lugar era una sala muy grande dividida por una reja, de un lado los varones y del otro las mujeres. Era como un sótano, porque la habían hecho bajar. Me contó que mi papá caminaba como un viejito de tanta picana que le habían metido en los testículos, que sentía un dolor muy grande en la espalda. Le pregunté como estaba psicológicamente, "bárbaro" me dijo… los interrogatorios eran por la noche - dice ella - me acuerdo que un día trajeron a tu papá y lo tiraron contra la pared, todo ensangrentado, muerto de frío. Disculpame. Lo tapamos con frazadas, lo curamos, pero estaba bien. Decía que estaba bien. Animaba a los detenidos ante tanto horror, que él mismo padecía…
…Quiero encontrar los restos de mi padre y darle una sepultura. No sé como voy a reaccionar si lo encuentro, hasta donde me va a dar la cabeza. Lo velaré en el sindicato.

Tenía pasión por el sindicato… el vivía en el sindicato. Fuéramos a donde fuéramos, el siempre tenía que pasar por el sindicato, entraba, miraba las paredes, no sé que hacía, peor siempre tenía que pasar por el sindicato, sábados, domingos, feriados, todos los días. El sindicato era su morada , lo suyo, su pasión”  

“La política es una vocación que cuando se asume con dignidad, termina en la cruz” Paulo VI